Reflexión REDA
Un diseño de investigación
bien estructurado es la clave para llevar a cabo una investigación efectiva.
Cada etapa, desde la formulación de preguntas hasta la selección de
instrumentos y la recolección de datos, debe estar cuidadosamente planificada
para asegurar que los resultados sean válidos, confiables y aplicables. Esta
comprensión no solo mejora la calidad de la investigación, sino que también
fortalece la capacidad para enfrentar y resolver problemas de manera
sistemática y rigurosa.
Realizar el REDA me permitió fortalecer mi comprensión de
los conceptos clave en la creación de un diseño de investigación y explorar
diversas técnicas de análisis de datos. Elegir el diseño adecuado y determinar
los datos a recolectar es un paso fundamental en cualquier investigación. El
diseño de la investigación actúa como una hoja de ruta, guiando al investigador
de manera sistemática para obtener los resultados esperados. Similar a una
construcción arquitectónica o la creación de un vehículo espacial, el diseño en
la investigación proporciona un camino claro y estructurado para alcanzar el
objetivo final.
En la investigación, el diseño responde a las preguntas
prácticas y específicas formuladas al inicio del estudio, estableciendo la
estrategia para recolectar la información necesaria. A través de este proceso,
el investigador busca corroborar las hipótesis planteadas mediante la
recolección y análisis de datos ordenados y pertinentes.
Para seleccionar el instrumento de investigación adecuado,
es crucial tener una comprensión clara del problema de investigación y
determinar si el enfoque será cualitativo o cuantitativo. Un diseño bien
estructurado no solo facilita la recolección de datos precisos, sino que también
asegura que los resultados sean válidos y confiables, contribuyendo de manera
significativa al conocimiento en el campo de estudio.
Evidencias
No hay comentarios:
Publicar un comentario